jueves, 27 de mayo de 2010

Profetas del Antiguo Testamento



Abdías se deriva del hebreo Obhádhyah, que significa "sirviente, servidor, o adorador de Yahvé". Eso es cognado del nombre árabe ' A Ubaidallah<>(Obeidallah) .En el Antiguo Testamento hay doce personas con este nombre, de las cuales el más importante es el profeta Abdías.




Abdías es el cuarto profeta menor y a quien se adjudica el más breve de los libros proféticos del antiguo testamento (contiene veintiun versículos).




profecía de Abdías trata casi exclusivamente con el destino de Edom, tal y como es dado a conocer en las primeras palabras. Dios ha convocado a las naciones contra Edom, que confía en su reacción rápida y dura, contundente, pero es en vano. Los ladrones la destruirían completamente . Los aliados y amigos han dado la espalda, y la sabiduría que cree poseer le fallará . Los castigos vendrán por la conducta mostrada hacia Judá, será cuando los extraños echen suertes sobre Jerusalén. Los resultados surgen a raíz de la conducta indigna . El "día de Yahvé" está cerca sobre "todas las naciones", en que donde la ruina espera a Edom y la compartirá unida a la "casa de Jacob" y "la casa de José" . En cuanto a Israel, las fronteras se ampliarán en cada dirección; los "salvadores" aparecerán en el montaje de Sión para "juzgar" el montaje de Esaú, y la ley de Yahvé será establecida .




Hageo era uno de los doce profetas menores y el autor del libro de Hageo. Su nombre significa fiesta, solemnidad.



Vida

El Profeta Hageo. Icono del primer cuarto del siglo XVII. Monasterio de Kiji, República de Carelia, Federación Rusa.
Hageo, Zacarías y Malaquías fueron los tres profetas posteriores al Destierro de Babilonia. Ageo y Zacarías fueron coetáneos y Malaquías vivió un siglo después.
Se conoce muy poco de su vida personal. Quizás fuera uno de los cautivos llevados a Babilonia por Nabucodonosor II. Empezó su ministerio aproximadamente dieciséis años después del retorno de los judíos a Jerusalén. El trabajo de reconstruir el templo se había detenido por el desánimo de los exiliados y las intrigas de los samaritanos. Después de haber estado paradas las obras de reconstrucción del templo durante dieciocho años se reanudaron las obras después de los esfuerzos de Hageo y Zacarías. Ellos exhortaron al pueblo, que despertó de su letargo, y les indujeron a aprovecharse del cambio de política hacia los judíos del gobierno persa bajo Darío el Grande





Celebración


La Iglesia Católica lo celebra el 4 de julio, la Iglesia Ortodoxa celebra su fiesta el 16 de diciembre y la Iglesia armeniale conmemora junto al resto de los profetas menores el 31 de julio.





Profeta Ámos


Amós era pastor y productor de higos en Técoa, en el límite del desierto de Judá (Amos 1:1). Fue profeta en Israel, el Reino del Norte, durante el reinado de Jeroboam II (783 a.C - 743 a. C.). Escribió el libro de la Biblia que lleva su nombre. Se le considera uno de los Doce Profetas a quienes se denomina "profetas menores" por la brevedad de sus libros (mas no por su calidad).





Amós, con la rudeza y estilo directo de un pastor e inspirado por la fidelidad a Yahveh, condenó la corrupción de las elites, la injusticia social y el ritualismo ajeno al compromiso de vida, anunciando el fin de Israel. Acusado por el sacerdote Amasías de conspirar contra el rey (Amos 7:10-11), fue expulsado del templo de Betel(Amos 7:12-13). Según el apócrifo Vida de los Profetas fue herido en la cabeza por un hijo de Amasías, a consecuencia de lo cual murió al llegar a su tierra.


Según la Biblia (Isaías 1:1), el padre del profeta Isaías se llamaba también Amós. Sin más base que el hecho de tratarse de homónimos que vivieron hacia la misma época, algunos han pensado que se trata del mismo personaje, pero la mayoría de expertos descartan esa hipótesis, dado el origen social de Isaías.





daniel





Daniel, como una persona de excepcional sabiduría y rectitud (Ez. 14: 14, 20 y 28: 3)). También aparecen mencionados otros dos personajes con el mismo nombre, a saber; Daniel, hijo de David (1 Cr 3:1 y 2 Sam 3:3) y Daniel hijo de Itamar, de familia sacerdotal, uno de los exiliados que retornaron con Esdras en 458 a.c. (Esd 8:2).

Daniel, el conquistador de Babilonia y sucesor de Belsasar, fue Darío, el medo, personaje desconocido por la historia y, probablemente, inexistente. Bajo el reinado de este soberano tiene lugar el complot de los sátrapas contra Daniel que derivó en su encierro en el pozo de los leones; esta intriga se valió de la religiosidad del protagonista pues, un edicto caprichoso sugerido al rey por aquellos prohibía cualquier petición, fuera a un dios o a un hombre excepto el soberano, durante treinta días. Daniel, como era su costumbre, oraba cada día y fue denunciado.
Arrojado al foso, el profeta no recibió daño alguno. A la mañana siguiente, cuando Darío comprobó el portento, ordenó liberar a Daniel y echar al foso a sus acusadores que perecieron devorados por las bestias. Un relato paralelo, que existe en las partes deuterocanónicas, atribuye la condena de Daniel al hecho de haber matado a cierto dragón sagrado que los babilonios adoraban y menciona que el profeta Habacuc fue llevado a Babilonia por un ángel, quien lo tomó por sus cabellos, para entregar su propia comida a Daniel.
En esas mismas secciones se menciona la sucesión de Astiages, la entronización de el giro Grande y el episodio por el cual Daniel revela el fraude de los sacerdotes de Bel que habían convencido al rey de que el dios comía las ofrendas, siendo que eran ellos quienes lo hacían.

Isaías (caredindo es salvación) fue uno de los profetas de Israel del Siglo VIII a. C., que profetizó durante la crisis causada por la expansión del imperio Asirio. Escribió por lo menos la primera parte del libro de la Biblia que lleva su nombre. Nació probablemente en Jerusalén 770-760 a.c y estaba emparentado con la familia real (parece que fue Primo de Ozías según la tradición talmúdica. Por sus propias declaraciones se sabe que estuvo casado con una profetisa y tuvo dos hijos.
Hijo de Amos, se le considera uno de los profetas mayores (lo cual depende exclusivamente de lo extenso del libro escrito). Se estima que el ministerio profético de Isaías llegó a durar cerca de medio siglo, desde el año que terminaba Azarías, rey de Judá, posiblemente hasta los tiempos de Manasés. Según los apócrifos Vida de los Profetas (1:1) y Ascensión de Isaías (5:11-14), murió aserrado durante la persecución provocada por el rey Manasés, a lo cual parece referirse Hebreos 11:37.
Isaías fue un firme opositor a la política de alianza de los reyes de Judá con los imperios y llamó a confiar en la alianza con Yahveh. En particular se opuso al protectorado de Asiria que el rey Acaz propició para enfrentarse a los reyes de Damasco e Israel (norte). El rey Ezequías quiso contrarrestar la hegemonía asiria, aliándose con Egipto a lo que también se opuso Isaías, pero cuando las tropas asirias de Senaquerib sitiaron Jerusalén, Isaías apoyó la resistencia y anunció la ayuda de Yahveh y la ciudad se salvó.

Jeremías (Anatoth, Judea 650 a. C. - Daphnae, Egipto 585 a. C.). Profeta hebreo, hijo del sacerdote Hilcías. Según él mismo escribe, fue llamado por Dios en el decimotercer año de gobierno del rey Josías. Es autor del libro de la Biblia que lleva su nombre: el Libro de Jeremías.
Con sus profecías desafió la política de los reyes de Judea, Joaquim y Sedecías y anunció el castigo de Yahvéh por la violencia y corrupción social, que rompían la alianza con Dios: Hablan de paz, pero no hay paz, escribió.
Según Jeremias 36:23 la primera versión de su libro fue destruida por el rey Joaquim, bajo cuyo gobierno el profeta vivió en continuo peligro de muerte . La persecución contra Jeremías se acrecentó bajo el mandato de Sedecías, que lo trató con crueldad y lo acusó de ser espía de los babilonios, por anunciar que Judea sería destruida si no se arrepentía de sus pecados y cambiaba para volver a la alianza con Yahvéh. Jeremías llegó a lamentarse por su destino, pero finalmente decidió continuar su misión profética Jeremias 20:7-11
Jeremías llamó a liberar a los esclavos como muestra de conversión. En principio su llamamiento fue acatado, pero luego los amos volvieron a esclavizar a quienes habían liberado, con lo cual el profeta consideró sellada la suerte de reino de Judea, de Sedecías y de Jerusalén (ver Jeremia 34:8-22). El anuncio de la derrota de Judea fue acompañado sin embargo, por la profecía sobre la futura ruina de Babilonia, la Nueva Alianza Jeremias 31:31 y la restauración.

Zacarías (Hebreo: Zekjar·yáh) es uno de los profetas menores, a quien se atribuye el libro que lleva su nombre. Su nombre significa Yaveh Ha Recordado. Zacarías se llama a sí mismo hijo de Berekías hijo de Idó (Zac 1:1,7) pero en otros pasajes se omite el nombre de Berekías. Probablemente nació en fer algún lugar de Babilonia, puesto que su actividad profética empezó tan solo diecisiete años después del regreso del exilio, y es razonable pensar que para entonces tenía más de diecisiete años, aunque todavía se le consideraba joven.
Yahveh se valió de Zacarías y Ageo para animar a Zorobabel, al sumo sacerdote Jesúa y a los exiliados que habían regresado a terminar la reconstrucción del templo de Jehová, aun cuando todavía estaba en vigor una prohibición del gobierno persa. La profecía de Zacarías contiene mensajes que pronunció con ese fin durante un período de dos años y un mes.
Una de las profecías que recoge el libro de Zacarías en el capitulo 11 y versículos 12 y 13 hace referencia directa al precio (treinta piezas de plata) que los principales de los sacerdotes ofrecieron a Judas por entregarles a Jesús. Ver el evangelio de San Mateo en el capítulo 26 y versículo 15.

Juan el Bautista, o simplemente el Bautista o San Juan, fue un predicador y asceta judío, considerado como profeta por cuatra religiones: Cristianismo, Islam, Mandeísmo y la Fe

Hijo del sacerdote Zacarías y de Isabel (Lucas 1:5). Juan es el precursor de Jesucristo.
Según Lucas 3:1-3, Juan comenzó a predicar y a bautizar en el desierto «el año decimoquinto del imperio del emperador Tiberio, cuando Poncio Pilato gobernaba Judea, cuando Herodes era tetrarca de Galilea, su hermano Filippo tetrarca de Iturea y Traconítide, y Lisanias tetrarca de Abilene, en tiempo del sumo sacerdote Anás y Caifás.
Tiberio sucedió a Augusto el 19 de agosto del año 767 (año 13 d. C.) de la fundación de Roma. Lucas pudo contabilizar los años siguiendo el calendario sirio, que inicia el año 1 de octubre, o bien el calendario romano, que comienza en enero, por lo cual no sabemos si tuvo en cuenta el primer año de la sucesión. Así, la fecha aproximada del inicio de la actividad del Bautista estaría en torno al año 28 de nuestra era.
Juan Bautista se definió a sí mismo como «voz que clama en el desierto: "rectificad los caminos del Señor"» (Juan 1:23), con lo cual cumplía expresamente una profecía de Isaías (Mateo 3:1-4,Lucas 3:4-6, Isaías 40:3-5). Marcos 1:1-4 une a ésta el cumplimiento de otra profecía, de Malaquias 3:1. Esta misma misión general, cumplir unidas ambas profecías, vista como una, fue definida en general por los esenios para ellos mismos, según la Regla de la Comunidad (1QS VIII 13-14; 4Q259 III 3-6), encontrada entre los Manuscritos del Mar Muerto y datada entre los años 100 y 75 a. C. También la liturgia bautismal esenia (4Q14) pudo haber servido de inspiración a Juan.

Descendiente de Judá. Hijo de Atai y padre de Zabad. Su abuelo fue un siervo egipcio llamado Jarhá. (1Cr 2:3, 34-36.)
2. Profeta de Dios durante el reinado de David; posiblemente, de la tribu de Leví. Cuando el rey le reveló a Natán su deseo de edificar un templo para la adoración de Dios, el profeta contestó: “Todo lo que esté en tu corazón... anda, hazlo”. (2Sa 7:1-3; 1Cr 17:1, 2.) Sin embargo, aquella noche Dios le informó a Natán que en vez de ser David quien le construyera un templo, Él le edificaría a David una casa estable hasta tiempo indefinido, y que más tarde sería el descendiente de David quien edificaría la casa de Dios. De modo que por medio de Natán, Dios le anunció a David un pacto para un reino “hasta tiempo indefinido” que no se apartaría de su línea. (2Sa 7:4-17; 1Cr 17:3-15.)
Más tarde, Dios envió a Natán para que señalara a David la gravedad del pecado que había cometido contra Urías el hitita con respecto a Bat-seba y la pena divina que se le imponía por ello. Natán lo hizo con tacto, pero de manera decidida. Se valió de una ilustración que hizo que David sin darse cuenta expresase sin prejuicios personales su propio juicio sobre esa acción. Natán le dijo a continuación: “¡Tú mismo eres el hombre!”, y dictó el juicio de Dios sobre David y su casa. (2Sa 12:1-18)
Bat-seba le dio a David un segundo hijo, llamado Salomón. Dios amó a ese hijo, por lo que envió a su profeta Natán, quien “por causa de Dios” llamó al niño Jedidías, que significa “Amado de Jah”. (2Sa 12:24, 25.) Cuando Adonías intentó apoderarse del trono, al final de la vida de David, Natán tomó las medidas necesarias para que este lo supiera. Luego tomó parte en ungir y entronizar a Salomón. (1Re 1:5-40.)
Al parecer Natán y Gad aconsejaron a David sobre el uso de los instrumentos musicales que se empleaban en el santuario (2Cr 29:25), y debieron ser quienes registraron la información de los capítulos de conclusión de Primero de Samuel y todo Segundo de Samuel. (1Cr 29:29.) “Entre las palabras de Natán el profeta” también se incluyeron “los asuntos de Salomón”. (2Cr 9:29.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario